El conspicuo audioprotestante Morgan

Profanándome a mí mismo, pero es lo que tienen la desidia y la falta de creatividad, en el blog de Rincewind (uno de los malignos chicos del manifestómetro) apareció el jueves pasado esta entrada digna de un anuario.

Resume muy bien lo que pienso de la pollítica (sobre todo de la nuestra, de la de ahora y de ambas cosas a la vez), y tiene puesta la muy acertada etiqueta de "sentido común".

Y poco más queda que añadir, salvo un pequeño apunte. Me hace mucha, muchísima gracia, que se describa como "movimiento ciudadano" la última ola de manifas. Lo de movimiento ciudadano es correcto, siempre que se considere su significado exacto: ese movimiento no viene de la ciudadanía, sino que está inducido sobre ella. Estas manifas, de uno u otro signo (hoy toca una con tricolores en lugar de aguiluchos), están convocadas por, para, en beneficio de y en perjuicio del rival de, los dos partidos mayoritarios, asi que no me vayan a contar que es el pueblo el que ha decidido tomar la iniciativa porque la situación sea sangrante. Simplemente, una parte del pueblo les hace la cama a los partidos subscribiéndose completamente y sin matizaciones al manual correspondiente a cada uno, a cambio, en muchos casos, simplemente de un bocata y un bus gratis a Madrid. Puro ilusionismo. El pueblo de verdad, ese que de verdad debería movilizarse de motu propio y como pueblo en lugar de como militancia, es sabio y plenamente consciente de que nadie les está resolviendo nada de sus grandes problemas cotidianos, reales y tangibles, porque los que tendrían que hacerlo están bailando en una fiesta (¿y adivinan quién pone la música del baile?). En el pueblo residen, aunque adormecidos por los cantos de sirenas de esa fiesta, el poder horizontal de movilizarse de verdad por cosas realmente suyas y no por cosas completamente ajenas a él, y la verdadera política, la que no se reduce a superpartidos que sólo buscan fidelizar votos como las empresas fidelizan clientes para darse baños de poder vertical.

Sonando ahora mismo: Bad Religion - Tiny Voices

Etiquetas: otroísmo, pollítica, proselitismo y demagogia

Que allá donde estén ahora los dos, donde hayan quedado, hagan reir tanto como hicieron con nosotros. Por aquí ya no está la cosa como para reirse. Y los pocos que lo consiguen, es a base de borderías, obscenidades y "gilipolluás". Porque es que ya eso del humor inteligente no se lleva, porque requiere un público también inteligente.

Hasta siempre, José Luis.


Sonando ahora mismo: de buena gana se lo compraría.

Etiquetas: pantalla de plasma, y ríase la gente

He estado de vacaciones. No lejos de Sevilla, sino lejos de la rutina. Y no solamente lejos de la rutina, sino cerca del resto de mi vida que me había dejado atrás demasiado tiempo.

Y el blog no estaba incluido, en esta ocasión, en ese resto de mi vida. Lo que he hecho estos días* es poco interesante, poco gracioso, poco morboso y poco opinable. Es completamente personal.

Espero tener ahora más tiempo para todo.

* Excepción aparte lo del bochorno del derby de copa, suspendido porque sólo en el estadio del Betis existe castigo sobre lo que ocurre en todos los campos. Lo único que queda de aquello es que sólo se castiga la combinación entre puntería, arte dramático y la ruina de imagen que atraviesa el club gracias a su infame directiva y a ese personaje que pone. Ruina sobre ruina sobre más ruina.

Sonando ahora mismo: Orbital - One Perfect Sunrise

Etiquetas: yomismoísmo